Ese 14 de Febrero, en ese día donde hay muchas risas,
alegrías y algunos momentos incómodos,
porque escuchaba cosas que me hacían recordad momentos felices que algún
día tuve, siento que no he olvidado que el año pasado dejé algo inconcluso, un
ciclo a medio término, y con un gran hueco de dudas, no podré resolverlo de eso
estoy seguro, lo dejé muy mal en el pasado, que aún sigo arrastrando conmigo,
de aquí hasta el día que realmente sea sustituido; quiero encontrar una
respuesta a toda pregunta, escribir solo me deja calmar el ansia de preguntar,
de solo gestionar y dudar un concepto, sin importar lo cuan transparente sea o
incluso abstracto, (refiriéndome al amargo recuerdo, sin memorias y que solo el
corazón entiende), definitivamente debo superar la etapa y dejar de estancarme,
ver el paso que sigue y vivirlo, sentirlo, hacerme el dueño de mi tiempo, he
sido influenciado todo el tiempo sin mirar el porqué, solo me dejo llevar…
Me
agradan esas ideas tan tontas que me ponen, no creo que un día fui libre simplemente
no lo recuerdo, un día tal vez fui feliz y tuve que olvidarlo, ya de tanto
pensarlo nació una obsesión, no por
conveniencia sino por placer.
Disfruto tanto el no pensar en mi, que dejo cualquier cosa
por ello, siempre dije pienso en mi primero antes que a los demás, error: dejo
de hacerlo para que los demás tengan que pensar en mí, no cabe duda que no he
estado haciendo las cosas bien, tu querido escritor, tu amigo de la infancia, “Mi Conciencia”, deja ya de mantener un
recuerdo muerto, un sueño frustrado, un deseo incumplible, y una hazaña
imposible, tengo más cosas que hacer que escuchar lo que piensas y que me sigan
seduciendo tus ideas…
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